
Junto a mis compañeres de Conurbanes Por La Diversidad, participamos de la Marcha Federal del Orgullo Antifacista y Antiracista, dentro de la columna de Frente Orgullo y Lucha, en una clara visibilización, no sólo del rechazo ante los discursos de odio que plantea Milei y La Libertad Avanza, sino también de los reclamos aún pendientes por la comunidad y que los gobiernos de la última década no supieron cumplir.
Es nuestra comunidad la que nos sostiene, es esa misma fiesta, unidad y organización que se mostró en la marcha que ha sabido lograr conquistar los derechos: la Ley de Educación Sexual Integral, de Matrimonio Igualitario, de Identidad de Género, de Interrupción Voluntaria del Embarazo, de Cupo Laboral Travesti-Trans, entre otras. Lo decía Jauretche, “nada grande se puede hacer sin alegría", y es eso lo que nos caracteriza, lo que nos une y encuentra en cada marcha, actividad o encuentro.
Esta no sólo fue la primera Marcha Federal del Orgullo Antifacista y Antiracista, sino que también fue mi primera marcha, y creo que lo fue también para muches que en noviembre tal vez no podíamos asistir, pero claramente no fue esa misma marcha, no fue el mismo contexto.
Seguiremos marchando y organizándonos, tanto en la centralidad, como descentralizando nuestros reclamos, nuestros discursos, que son de amor y unidad, hacia nuestros propios territorios, hacia nuestros contextos. Como dijo Susy Shock, hay que volver a explicar las cosas, hay que volver hablar, hay que ir a los barrios, casa por casa, a contarles nuestra realidad como seres humanos.