
Ante tanto desastre, aún no veo que haya organización de los espacios que nos representan ante ello, al contrario, son las minorías que en masa se organizan para hacerle frente a discursos de odio, a las políticas del gobierno de Javier Milei y La Libertad Avanza, que día a día no sólo le roba derecho al Pueblo, sino también personas al PRO y otros partidos. Nosotros no organizamos los reclamos de las universidades, de jubilados o del colectivo LGBTIQANB+, sino que “nos subimos” a ellos, acompañamos las marchas, sus reclamos, pero no supimos, ni aun sabemos, como organizar esa bronca, es algo que, desde mi punto de vista, aún nos falta, y que debemos hacernos cargo que es un gran enojo del Pueblo ante gobiernos que no supieron saciar sus necesidades, entiéndase por los gobiernos de Macri y Alberto.
Como militantes, podemos hacer mucho, pero a la vez poco, y digo esto siendo que no tenemos este poder absoluto de transformarlo todo y de replantear puntos que deberían corregirse. Podemos pensar actividades, encuentros, reuniones, lo micro; pero lo macro de la política partidaria se resuelve en mesas chicas a las que, como militantes de base o referentes barriales, no tenemos acceso. Estamos frente a un gran problema que crea múltiples otros que debemos resolver. ¿Quién es la persona responsable de los discursos de odio, de que le falten medicamentos a los jubilados y que tengan pésimos haberes, de que falten insumos para personas que conviven con VIH, que canceló el FONID para docentes, que está privatizando todo a mansalva, entre otros? Milei. ¿A quién vemos como posible ganador en las legislativas? A Milei. ¿Por qué? Porque no estamos contándole al vecino las cagadas que se está mandando, no sabemos explicar porque Milei no nos representa. Siento que aún no nos hemos recuperado del knock out del 2023, que todavía estamos en una nube, viendo que hacemos para recuperar la Patria. Al contrario, estamos viendo quién “la tiene más larga”, quiénes son los que conducen o quién es “el líder”, quién nos representa.
Hay ideas y puntos de vista que tiene Cristina, Kicillof y Moreno con los que coincido y otros con los que no. Pero, ¿qué importancia tiene que un joven militante de 27 años del conurbano diga con quién coincide o no? Ahí está el problema, “ningún peronista debe creerse más de lo que es ni menos de lo que debería ser”, esta, que es una de las verdades peronistas, es a lo que debemos volver. Hay mucho de la doctrina que nos estamos olvidando y nos la estamos pasando “por ahí”. “El que gana conduce, el que pierde abandona”, debemos poder democratizar las acciones, de abajo hacia arriba y no al revés. Debemos volver a las reuniones en los barrios, en las básicas, a los plenarios, a debatir las ideas, producir documentos, decisiones, posiciones que lleguen a las conducciones locales, de ahí a las provinciales y finalmente a lo nacional. Dice el Papa Francisco, “cualquiera de nosotros puede cambiar una estructura si es justo lo que queremos”, tenemos que actualizar al justicialismo, debemos aprovechar las herramientas actuales. Aún profesamos una doctrina que, si bien debe ser la base de nuestras acciones, debemos reimaginar, resolver y actuar en consecuencia. Estamos frente a un Pueblo que no es ingenuo, como muchos piensan, sino que ya sabe cómo actuamos, pero que no es escuchado, que se siente que no es parte, que no se lo toma en cuenta, que se escapa a esas decisiones que se toman en la mesa chica.
Las dirigencias deben escucharnos, tanto a quiénes somos militantes de base como a quiénes son del Pueblo y no participan activamente de la política partidaria. Como dije anteriormente, volver a construir de abajo hacia arriba, volver a las bases, pero teniendo en cuenta los reclamos del presente, las necesidades actuales, y para ello necesitamos más unidad que nunca, que es algo que lo venimos hablando desde 2017, pero que aún, por lo menos yo, no he visto fruto alguno.
Espero que este documento sea para la reflexión de todas las personas que lo lean, invitándolas a que podamos plantear estas discusiones en los espacios a los que pertenecemos o que sea el incentivo para juntarnos, reunirnos y rearmar lo ya construido. Les saludo con un gran abrazo.