Desde el 2001, se venían gestando varias protestas en contra de la dolarización, de los bajos salarios, de una economía que estalló con la llegada del FMI, nuevamente, en nuestro país. Durante la gestión como presidente de Duhalde, se presentó un proyecto en el Senado que, por primera vez en mucho tiempo, ordenaba la devaluación del peso argentino. Esto movilizó a un más a la protesta social de organizaciones sociales, políticas y el rechazo de la sociedad a políticas económicas que, lejos de mejorar la estabilidad de miles de familias argentinas, la empeoraba.

Seis meses después del “que se vayan todos”, el 26 de junio del 2002, bajo las consignas de aumento del salario, más alimentos para comedores populares, entre otras, el Movimiento de Trabajadores Desocupados (MTD) intentó corta el Puente Pueyrredón, lugar en donde los esperaba la Policía de la Provincia de Buenos Aires. En medio del desalojo y de los incidentes producidos entre quiénes se manifestabas y las fuerzas de seguridad, el hecho se cobró la vida de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki, quiénes pertenecían a la Coordinadora Aníbal Verón.

La estación de la Línea Roca que anteriormente era llamada Avellanada, cambió su nombre en homenaje a Darío y Maxi gracias a la Ley 26.900 que se sancionó el 13 de noviembre del 2013 y luego promulgada el 3 de diciembre del mismo año, para poder hacer memoria de este hecho de violencia institucional en el marco de los últimos años de neoliberalismo en el país, que comenzó en los 90 y termino en el 2003, con la llegada de Néstor Kirchner a la presidencia. Los fundamos del proyecto de ley destacan que “sus nombres representan la dignidad y la solidaridad".

Recién con la presidencia de Néstor, el derecho a la protesta social fue garantizado, él mismo dijo: “¿Qué quieren? ¿Un pueblo apagado, sin esperanza?”. Para el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), la protesta “es un componente esencial de toda democracia que involucra derechos fundamentales como peticionar a las autoridades y expresarse en libertad”. En conclusión, las marchas, las movilizaciones que la militancia siempre realiza en cada momento son parte de imponernos ante una minoría de la derecha que nos quiere silenciados, mientras crean sus políticas y acciones para empobrecernos y quitarnos nuestros recursos más importantes. Sigamos movilizándonos por una patria libre, justa, soberana y equitativa.

RECURSOS:

Ley 26.900 Fundamentos del proyecto de ley Expediente y tratamiento en Diputados y Senado


FUENTES:

Wikipedia CELS La Nación